Era el Torneo Apertura del 2014, los Gallos de Nacho Ambriz recibían al superlíder general, que para variar, se trataba del América. Era la jornada 14 de dicho torneo y los queretanos tenían que ganar para estar más cerca de puestos de liguilla.
Apenas en la primera mitad, Camilo Sanvezzo envió desde el borde del área rival un disparo que superó a Moises Muñoz para poner adelante a los locales. Cerca del final del primer tiempo, William Da Silva finalizó un contragolpe (orquestado por Sanvezzo) que terminaba en el segundo del Gallo.
Parecía que la parte complementaria sería de trámite, pero bien dicen que el 2-0, es el marcador más engañoso del fútbol. Tras una expulsión de Ricardo Osorio; Oribe Peralta y Luis Ángel Mendoza nivelaron el marcador para el ave de las mil tempestades. Los albiazules, que en esa ocasión salieron con un llamativo uniforme rosa, estaban dejando ir un triunfo vital.
Sin embargo en el tiempo de compensación, Sanvezzo se inventó una jugada en el área americanista y, con un sutil toque, marcaba su doblete que le daba el triunfo a Querétaro sobre la bocina.
A pesar de la victoria y de tener al mismísimo Ronaldinho en el plantel, Nacho Ambriz no pudo llevar al equipo a la fiesta grande. Aunque a decir verdad, esa victoria agónica sigue siendo una de las más recordadas entre la afición.
