El clásico de la 57, un evento que todo aficionado gallo marca como de no perderse en el calendario. En esta ocasión el conjunto queretano llegaba con la urgencia de por fin darle la alegría de 3 puntos a la afición y que mejor manera de hacerlo que ante el acérrimo rival.
El partido empezaba y seguíamos con la misma tendencia mostrada en todo el torneo. Una defensa tremendamente endeble que pierde muy fácil la marca. Fue así que apenas al minuto 10 Gallos empezaba perdiendo el partido.
El partido seguía con el dominio claro potosino y un conjunto queretano que no mostraba signos de reacción.
Guillermo Alisson fue factor clave para evitar la debacle queretana con 2 tremendos atajadones que hubieran cambiado la dinámica del partido.
Cuando parecía que todo estaba perdido, llegó un centro fortuito por parte del cuadro queretano que Ali Avila remató de manera perfecta e hizo estallar al Corregidora.
La alegría duraría poco ya que Avila salió lesionado y de ahí el partido se trabó hasta llegar al medio tiempo,con un Gallos que adolecía completamente la falta de un 9 que retuviera la pelota.
El segundo tiempo comenzaba igual de trabado. Pero en una gran recuperación por parte del mediocampo queretano veríamos una definición perfecta por parte de Juan Robles. La afición estallaba de emoción ya que estábamos en una situación no tan vista en el torneo, Gallos iba ganando.
A partir del gol, Gallos fue agarrando forma al establecer bien paradas sus líneas defensivas. Del minuto 50 al 65 pudimos ver de las mejores demostraciones defensivas del torneo por parte de los Gallos.
Pero de pronto, en una jugada muy confusa el árbitro marcaría un penal en contra, el cual revisó por mucho tiempo y al final decidió marcar la pena máxima. Este penal, fue cobrado de manera impecable por parte del conjunto potosino y a falta de 20 minutos todo volvía a estar empatado.
El partido parecía que llevaba a su fin y ningún conjunto lograba sacar esa jugada que cambia resultados pero de pronto el árbitro volvió a ser protagonista pero esta vez a favor. Se revisaba un posible penal y esta vez era marcado a favor de Gallos.
Homenchenko sería el héroe de la velada, con un tremendo cobro de penal. Lo verdaderamente destacable fue el festejo donde se juntó el cuerpo técnico y jugadores a gritar una victoria que les urgía.
Y fue así, como Gallos pudo conseguir su primera victoria y que mejor manera que en el clásico de la 57 frente a su acérrimo rival, el Atlético San Luis.