Si por algo se caracteriza Víctor Manuel Vucetich es por el pragmatismo que le impregna a sus equipos. El Rey Midas, a lo largo de toda su carrera, siempre ha priorizado jugar a partir del orden defensivo, para después pensar en el arco rival. Tanto en su primera etapa con Gallos como con Rayados, Víctor siempre optó por tener equilibrio en todas las líneas.
Desde su llegada a Querétaro, el DT mexicano le dio un giro al estilo de juego que Gallos solía practicar. Con Rafael Puente Del Río al mando del equipo, los queretanos practicaban un fútbol posicional, en donde la posesión de la pelota y llevar la iniciativa del partido eran los principales objetivos. En contraste, Vucetich practica un fútbol diametralmente opuesto, ya que, como mencioné anteriormente, se decanta por primero organizarse en su propio campo, aunque esto signifique renunciar a la tenencia del balón.
Dicho esto, uno pensaría que en estos cuatro partidos dirigidos, Gallos se ha caracterizado por la solidez defensiva, pero en realidad no. Y sí, es complicado imponer un estilo en menos de un mes; sin embargo, Gallos con Vucetich ha contado con mucha suerte. Frente a Morelia y Chivas, el arquero Nicolás Navarro fue figura, puesto que tapó por partido, al menos tres jugadas claras de gol, dejando en manifiesto las serias deficiencias defensivas del equipo. Además, en ataque, Querétaro tampoco es que intimide mucho, los albiazules buscan ofender mediante transiciones rápidas, no obstante, el equipo muestra poquísimos automatismos a la hora de contraatacar.
En algún momento, Marcelo Bielsa declaró: “Se escucha mucho la pregunta ganar o jugar bien. Creo que debería ser una afirmación: jugar bien para ganar, y no una interrogación entre dos opciones”. Concebir el fútbol a partir de la posesión de la pelota, para a raíz de ello, someter al rival, es probablemente una de las formas más bellas que existen en el fútbol para ganar.
El orden en el fútbol está sobrevalorado, esa es mi idea, pero no cualquier orden. El orden mal implementado es el que está sobrevalorado, y aunque suene como una obviedad, la realidad es que al parecer no lo es para muchos. En las últimas semanas, hemos escuchado que Vucetich le ha dado otra cara a Gallos Blancos, sin embargo, aunque los resultados han mejorado en relación al comienzo del torneo, Querétaro sigue mostrando severos problemas en la parte baja del campo, por lo que les generan mucho daño cuando son atacados.
Inteligentemente, Vucetich es consciente de las limitantes de su plantel y crear un plan de juego reactivo es lo más lógico, ya que Gallos no cuenta con las herramientas para ser protagonista del juego. Partiendo desde el 4-4-2, el Rey Midas le da diversas tareas a sus futbolistas, por ejemplo, en el mediocampo, la dupla Güémez-Sierra ha funcionado muy bien, ya que Javier se encarga de ser el corrector, mientras que Jordan funge más como un gestor del juego ofensivo.
La directiva queretana acertó trayendo a Vucetich, ya que a corto plazo, por su estilo de juego, el técnico mexicano sumará puntos. No obstante, si se pensaba en generar un proyecto a futuro, Víctor no era la mejor opción. De cara al siguiente torneo, Gallos estará inmiscuido en la pelea por el no descenso y reforzar el equipo será fundamental para que Vucetich pueda realmente implementar el fútbol pragmático que a él le gusta.
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